Nueva sección. Repasemos algunas estrategias de conquista de las personas que tengo cerca.

Empecemos por F. (y roguemos que nunca leas esto Pancho).

F. es, a todas luces, gay. Pero gay maaaaaaaaal (así con muchas aaaaa). Se viste como gay, camina como gay, habla como gay, mueve las manos frenéticamente al hablar como gay y hasta sabe cosas que solo saben los gays (tipos de cremas para cada tipo de pelo, por ejemplo). Es un gay marica.
Es, claro está, sumamente cariñoso, comprensivo y hablador. Jamás se niega a una ronda de mates, a acompañarte a comprar ropa o a escuchar el relato de cómo te peleaste con tu vieja cien millones de veces.
Tiene buen gusto para vestirse, para decorar su casa, y para elegir al galancete de moda. Nunca lo ví, en una reunión de amigos, abandonar la cocina llena de féminas para ir a ver cualquier partido de fútbol, ni tampoco lo oí decir ?no se? cuando le planteas un mujerismo ridículo y debe ser la persona que mejor combina su ropa. Es como los Queer Eyes pero un resúmen de todos en uno.

F. se la pasa garch****. Pero maaaaaaaaaaal eh. Y siempre, siempre, con mujeres distintas. Perras, zarpadas, nenas de mamá, más grandes, más chicas. Todas caen, tarde o temprano.

Y bue. No importaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa