
martes, marzo 18, 2008
Prontito por la salida
Hola, vengo a escribir algo porque el monotematismo de este lugar ya me esta enfermando un poco la cabeza. Loco, me siento mas o menos como en época de mundial. Y eso que todo el mundo sabe que me dejo de interesar el fútbol cuando Boca perdió la final de la Libertadores con Colo Colo, y al Mono lo perseguían los perros y le morfaban el short... Sí, por lo menos es gracioso. Ya se, jaja. Bueno, no
Ponele, me siento como en época mundialista cada vez que entro acá. En el taxi, el chofer te habla del partido de Zamunda contra Belfast. En el bondi, no podes parar de escuchar las conversaciones de todos hablando de fútbol. Eso nos convierte en un país tercermundista, nos manejan como quieren, carajo.
Vas a un bar, y en la mesa de atrás: fútbol. El plasma de la pared: fútbol. En los balcones: banderitas. No se, hablo o pienso en fútbol y me siento sucio, como que no da. Me parece un deporte muy blando, muy de bala perdida. Peor que el ping pong. En definitiva: el monotematismo apesta.
Entiendo que este sea un lugar que vendría a ser como una red social super enorme y vasta, pero aflojemos. Es como la tortura china de la gotita en la frente. Eso es monotematismo, eso puede llegar a matar a una persona. ¿Ven a qué me refiero? Y claro que puede llegar a matar un lugar como este. ¿Por qué? Porque ya no hay interrelación, no hay feedback. El feedback queda reducido a su mínima expresión, a gente que es tan monotemática como la consigna misma. No hay flexibilidad en la comunicación, no hay metas comunes. Y claro, en un espacio que se sustenta en la operatividad de las interrelaciones vía Internet eso es... bueno, eso. No hay pluralidad de opciones. No hay opiniones. No hay nada, es como hablar de fútbol, mas o menos así.
Matalo, tapalo con el Crónica de ayer, pero dejame la contratapa.
Ponele, me siento como en época mundialista cada vez que entro acá. En el taxi, el chofer te habla del partido de Zamunda contra Belfast. En el bondi, no podes parar de escuchar las conversaciones de todos hablando de fútbol. Eso nos convierte en un país tercermundista, nos manejan como quieren, carajo.
Vas a un bar, y en la mesa de atrás: fútbol. El plasma de la pared: fútbol. En los balcones: banderitas. No se, hablo o pienso en fútbol y me siento sucio, como que no da. Me parece un deporte muy blando, muy de bala perdida. Peor que el ping pong. En definitiva: el monotematismo apesta.
Entiendo que este sea un lugar que vendría a ser como una red social super enorme y vasta, pero aflojemos. Es como la tortura china de la gotita en la frente. Eso es monotematismo, eso puede llegar a matar a una persona. ¿Ven a qué me refiero? Y claro que puede llegar a matar un lugar como este. ¿Por qué? Porque ya no hay interrelación, no hay feedback. El feedback queda reducido a su mínima expresión, a gente que es tan monotemática como la consigna misma. No hay flexibilidad en la comunicación, no hay metas comunes. Y claro, en un espacio que se sustenta en la operatividad de las interrelaciones vía Internet eso es... bueno, eso. No hay pluralidad de opciones. No hay opiniones. No hay nada, es como hablar de fútbol, mas o menos así.
Matalo, tapalo con el Crónica de ayer, pero dejame la contratapa.