Lo peor no es cuando dejás de ser esa pendeja veinteañera apetecible por la que un cuarentón se divorcia. No, no.

Lo PEOR es cuando pasás a ser la vieja a la que le preguntan si el chabón que tiene al lado es el hijo.


PD: No, no se zarpen, no es autobiográfico

PD2: Sí, dentro de poco cumplo años.

PD3: No, sigo siendo veinteañera. En el límite, pero aún lo soy

PD4: No, esto no es una sutil manera de manguear regalos

PD5: Sí, pueden mandarmelos

PD6: La última... vez que miré era Theoden quien gobernaba la marca.

Este blog (y su dueña) extrañan así pero mal mal... a Cachito



Sin con esto hacer la gran hijo pródigo y renegar de quienes sí siguen viniendo y a quienes queremos (siempre: el blog y yo) a mares. Posta les digo.